Los fines de semana cuando toca ir a Anguiano son cortos y muy intensos. Te los pasas saludando gente que te apetece ver después de un tiempo que siempre es largo aunque sólo pasen meses, muchas ganas de abrazar y compartir lo bueno con primos y familia. Pero con June no es todo tan fácil, la logística de sus comidas va en contra de los horarios que nos apetecería tener a los demás, así que entre una casa de unos abuelos y la otra casa de los otros nos pasamos todas las fiestas de Gracias.
Estar con Unax y Uxue es algo que a June le vuelve loca, se siente más protagonista que nunca, y quién no, cuando hasta para comerte la papilla te están mirando como si se tratase del comensal más interesante del mundo. Por suerte la televisión de los domingos viene cargada de deportes y dibujos que compiten como foco de atención con June.
Mientras su madre aprovecha y cucharada va y cucharada viene le endiña un yogur tras otro sin que June ni tan siquiera pestañee. De fondo, la abuela preparando la cocina, el abuelo recordando que ya es hora de comer, el ver a su nieta comiendo le ha provocado apetito, algunos tíos comenzando a desperezarse de una larga noche.
Frente al televisor los conseguí juntar a los que estaban más presentables. La abuela Carmen con su cara inmutable de pose fotográfica, el abuelo Pedro diciendo "eres mía", Unax aguantando a June por el brazo, pero sin dejar de ver la tele, Uxue haciendo lo propio pero sin soltar la pierna, y mientras June con su pañuelo fular llevándolo de un lado a otro.
Que me lo quito, que me lo pongo, que no te dejo ver la tele, que me sueltes, que me agarres, que miro la tele y no me entero de nada,… June se lo estaba pasando bien.
Pero la tele no quitaba el poder de atracción, aunque Carmen siguiera en la misma posición después de cinco minutos, al igual que Pedro al que ya se le empezaban a caer los ojillos.
En casa de los otros abuelos se repetían las mismas escenas, con un abuelo Marcelino acabando el postre, la rapidez comiendo nunca ha sido su fuerte, y la abuela Maribel jugando con June al corre, corre que te pillo, y no identificando muy bien, cuál de las dos se lo pasa mejor. De abuelos a abuelos y se acabó el fin de semana de Gracias.
30/09/2012