viernes, 10 de mayo de 2013

Nacimiento de Naia 05: Nombre y tripa a la espera



Los días iban pasando. Cruzábamos los dedos cada lunes de cada semana intentándole robar al tiempo algo que no nos pertenecía, algo incontrolable como es la vida. Así, poco a poco, llegamos al mes de abril, poco a poco lo estábamos consiguiendo. Pasar las dos primeras semanas era llegar casi al final del camino y Naia se empezaba a acomodar en una tripa cada vez más grande de su madre.


Pasados los casi dos meses de reposo absoluto, Ana empezaba a poder moverse un poco más, que lo estaba deseando, aunque su embarazo cada día más avanzado la hacían cansarse en la misma proporción. Las dosis de hierro y vitaminas continuaban en altas dosis, pero ya nos veíamos como triunfadores. Un poco antes ya habíamos decidido que nombre ponerle a nuestra segunda hija, no fue difícil, ya con June casi habíamos decidido cual era el otro nombre que nos gustaba si tuviéramos otra niña.


El nombre era Naia, me gustaba principalmente por contener el nombre de la madre, Ana del Mar. Ana es nacida en abril, y Naia pensábamos que también, como así fue, así que al igual que June, géminis como yo ha salido mi viva estampa, Naia sería la de la madre. En Naia, están todas las letras de Ana, y además significa fluir, al igual que el agua del mar, de la raíz griega "nan" de Nais o náyade. El nombre es de origen bretón y posiblemente derive de una forma familiar de Ana. Naia, Nahia en euskera significa "deseo" "deseada", y ciertamente lo es.


De igual manera y tras las revisiones con el ginecólogo, Ana empezó a ir a las clases de preparación al parto, que vienen muy bien para recordar todas las cosas que habíamos pasado con June. Ana seguía con su buen humor, pero esta vez, pese a que le pedimos los papeles y la documentación que había dicho que nos iba a mandar, todavía no nos ha llegado, y pese a que ya hemos hecho todos los papeleos y trámites, tal vez nos llegue algún día.


También tocó empezar a ir a los cintos para el test basal, ahora parece que el problema era que no estaba dilatando nada a pesar de tener contracciones. Nos tocaba esperar, pero en sus propias palabaras nos anunciaban que todo estaba demasiado verde. Y es que todo no podía ser, después de pasarse dos meses apretando para que no saliera demasiado pronto Naia, ahora tocaba destensar, pero no siempre pasa lo que uno quiere.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...