lunes, 2 de diciembre de 2013

Junio fresquito en el parque II



Me dediqué a mirarla. A darle distancia. A contemplarla. A enamorarme de sus gestos. A sentir como la vida me regalaba su compañía. Su timidez en principio se hacía protagonista, todo lo miraba con unos ojos abiertos circundados de grandes pestañas que parecían no dejar escapar ningún detalle. Sin conclusiones. Sin decisiones. Pero tal vez, con reflexiones.


La miro y me recuerda mucho a mi, ya sé que es lo que dicen todos los padres, pero me refiero a lo que nace desde dentro, a lo que todavía no se educa, a ese tempo que te tomas para reflexionar como enfocar lo que tienes alrededor. Lo que yo hacía con ella de mirarla con los ojos abiertos, ella lo hacía con su mundo de la misma forma, sin prisas, pero con cierta inteligencia.


La vida te guarda grandes alegrías, más allá de lo que te pueda suceder mañana o pasado. Tan sólo verla y sentirla, ver como está hecha de pedacitos nuestros me hace amarla y entenderla más allá de lo que nos tenga deparado el destino. Os dejo con una canción de Antonio Orozco que creo refleja claramente lo que os quiero contar:



01/06/2013

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...