Hay momentos que difícilmente se repiten en la vida, cada día que pasa June va creciendo, se hace cada vez más señorita, poco a poco pesa un poquito más, y no hay cosa más bonita que se me quede dormida en los brazos, la acuno sobre mi pierna haciéndole el caballito y poco a poco, aunque berrea un poco, va quedándose dormida y cayendo sobre mis brazos, os aseguro que hay pocas cosas más bonitas.
06/11/2012
No hay comentarios:
Publicar un comentario