martes, 16 de octubre de 2012

Traviesa no, lo siguiente



Si se nos ocurre dejar un segundo sola a June, nos la lía parda, con esa carita de niña buena y esos ojos que sólo desprenden bondad (tan sólo su sonrisa la delata), siempre está intentando descubrir cosas nuevas, aunque haya obtenido un "no" anterior. Así había pasado con la bicicleta, le habíamos advertido que no se acercara a ella. Teníamos miedo de que se le cayera encima. June asentía, pero al darnos la vuelta tan sólo un minuto, la encontramos así, con toda la cara pintada de la grasa de la bici.


No se le había ocurrido otra cosa que tocar los engranajes y le había hecho gracia esa capa negra que había encima de ellos.


Y luego claro, se pasó la mano por encima de la cara y el resultado fue el que podéis ver en las fotos. Para cuando nos dimos cuenta, no podíamos ni echarle una reprimenda, nos estábamos riendo por los suelos sólo de verla a ella. June veíamos que nos reíamos y sin entender mucho por qué, a sabiendas de que había hecho algo malo, se reía también por solidaridad.


Pero es que con esa cara a quién queremos engañar. Traviesa no, lo siguiente.

25/07/2012


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...