En febrero también en la guardería se celebraban los carnavales, así que había que disfrazar a June de algo para que lo compartiera con sus compañeros de guarde. Nuestra falta de tiempo nos impedía haberlo tomado como un juego y haber hecho algo mucho más creativo, pero no es lo que se quiere, sino lo que se puede. El objetivo es que disfrutara de su primer disfraz oficial.
Marché el sábado a buscarle un disfraz, y por si puesto, mi primera opción fue una tienda de chinos, con el temblor de que no le saliera un sarpullido por la calidad de los tejidos, pero para lo que lo iba a usar, no merecía la pena gastarse más. Me tocó mirar entre un montón de disfraces y al final seleccioné estos dos, su madre sólo me autorizó el de la izquierda, a mi me hubiera gustado el de la derecha para poder usarlo cuando los castigos, pero optamos por el mundo ChinaDisney.
En cuanto June vio la bolsa con el disfraz se volvió loca, se lo quería poner inmediatamente, y cualquiera le dice que no, jugábamos con ventaja, Minnie es su personaje favorito, y para ella era algo especial vestirse como ella. Asistía a todo el proceso de cambio de personalidad sin dar ningún mal ni ponerse a rodar encima de la cama, algo que nos suele hacer cuando le ponemos la ropa del día a día.
Para el disfraz el gorro no era de lo más acertado, una oreja miraba para Cuenca y la otra para Galicia, pero eso a June le daba igual, estaba encantada con su primer disfraz.
Posaba como una ratoncita tranquila por momentos y luego se aceleraba, poco le importaba el calor que podía estar pasando con la calefacción de casa, de repente nos dimos cuenta de lo mal que lo íbamos a pasar cuando se lo intentásemos quitar.
June estaba feliz e impresionaba ver como con tan poco se podía hacer feliz a una persona. De pequeño nunca me disfracé, ni me disfrazaron, miraba a June y sentía una sana envidia, aunque no me imagino de pequeño disfrazado de Minnie, más habría parecido Ratatouille, por decir algo bueno.
Así aguantó toda la tarde, al menos conseguimos quitarle el gorro, pero todo lo demás continuó hasta que dormida se lo pudimos quitar. Por fin había conseguido su sueño, por un día era June Mouse.
11/02/2013
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