sábado, 9 de noviembre de 2013

Torres más altas han caído



Aquella tarde nos dedicamos a hacer castillos o a algo parecido, conseguí que June me dejara jugar con todas las piezas y más yo que ella nos dedicamos a levantar un castillo que en la parte de abajo tenía ruedas y se podía mover. Una vez realizada esta obra de arquitectura efímera la dejé a ella que hiciera lo que más le gustase, tal vez la suerte del castillo estaba marcada.


Al principio se contuvo un poco, pero enseguida se lanzó a intentar tocar la parte más alta, obstinada en poner una bandera distinta de la que estaba. Los primeros temblores comenzaron.


Aún así June seguía obstinada en que se pudiera levantar. Una y otra vez volvía a recomponer la torre, y más una, que otra vez, la torre se volvía a caer. June finalmente decidió no recuperar la altura, e intentó atacar otro de los lados de la torre del castillo.


Ponía una ficha y se le caían tres. Cada vez la torre se movía más de un lado para otro. No pintaba nada bien la reforma de la fachada del castillo.


A su manera poco a poco se iba levantando, pero siempre aparecían nuevas fichas que intentaba poner en la parte de abajo, aunque no había huecos, ya que en la de arriba sabía que era lo que podía pasar.


Finalmente, no pude evitarlo, y a sus palabras lastimeras solicitando ayuda, les hice caso. Acabé la torre con las pocas piezas que quedaban mientras June conservaba algunas en la mano con la clara idea de intentar ponerlas. ¡Qué miedo daba!


Finalmente pasó lo que tenía que pasar, al intentar poner sus fichas, una de las ruedas de la base cedió y la torre del castillo se convirtió en una especie de torre de Pisa. En primera instancia June intentó abandonar la obra.


Pero con mis palabras de ánimo volvió para intentar recomponerla. Ya era una cuestión de poco tiempo que la torre diera con sus fichas en el suelo, intentar levantarla de un lado hacía que temblasen todas las piezas del otro.


Finalmente June tomó manos en el asunto y se dedicó a destruir la torre, y por la velocidad y la sonrisa con que lo hacía parecía que era lo que había deseado desde un principio, y es que torres más altas han caído.

09/03/2013

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